miércoles, 29 de febrero de 2012

Sobre la competitividad

El domingo haciendo la crónica del partido Mercantil-Damm cometí un error , algo que siempre critico y que nunca menciono : hablé de la actuación del árbitro . No creo que el empate , y con algunos días de por medio , se pueda justificar por tres o cuatro decisiones arbitrales . El Mercantil hizo muy bien su trabajo , trabajó para conseguir algo positivo a su favor y consiguió un importante punto para lograr la salvación ; la Damm no estuvo a la altura esperada y el árbitro tomó decisiones que no nos gustaron a los cerveceros , pero que posiblemente desde otro prisma se vean diferentes . Justificar no llegar al objetivo marcado poniendo a los árbitros por medio es una manera de justificar los errores poco pedagógica , no acaba de llevarnos a solucionar el problema . Estamos viviendo en una categoría muy competitiva , nadie regala nada , cada balón debe trabajarse y cada jugada requiere condicionantes técnicos y tácticos de gran nivel para llegar a buen puerto . En la competitividad está la clave , no todos los jugadores poseen ese punto en el que su valor futbolístico acaba imponiéndose y por eso solo los de mayor valor competitivo juegan en las máximas categorías . Este valor acaba por determinar quien acabará llegando a un nivel profesional alto cuando acaban su etapa formativa y no hace falta tener un valor futbolístico excepcional , ejemplos de jugadores de nivel medio en la alta competición a patadas . Su valor competitivo es el que les lleva a la cima .
Creo que un jugador , hoy en día , debe estar mentalizado para trabajar cada partido como si estuviera en un examen importante ; bajar la guardia , no estar a tope o no tener la mentalidad competitiva necesaria nos lleva a no poder desarrollar el potencial de fútbol para llegar al éxito individual y de equipo . Esto , y no la excusa del árbitro , explica algunas veces por qué no se ganan algunos partidos .

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