Arbitros , esos necesarios incomprendidos.

La polémica actuación del árbitro asignado al partido Anguera-Damm de esta semana pasada ha generado una visión sobre un colectivo que debe cambiar .


Si hay algo básico y esencial para la correcta disputa de un partido de fútbol , aparte del terreno de juego , dos equipos y pelota , es la figura del árbitro . Sin él no nos pondríamos de acuerdo nunca , o casi nunca , y sin él no podríamos desviar la atención de nuestros fracasos ya que casi siempre perdemos por decisiones desacertadas del trencilla de turno . Creo que el máximo error que hay cuando no conseguimos un resultado positivo es inculpar a otra tercera persona que ha venido exclusivamente a torpedear nuestra táctica y a hundir nuestra moral con sus decisiones , y a no reconocer nuestras limitaciones o nuestros fallos .Así nunca aprenderemos a avanzar en nuestro progreso o a mejorar en la consecución de nuestro objetivo . Tengo 44 años y esta temporada aún juego una liga de veteranos ; contando que empecé federado con 10 años habré disputado , con el año de mili por medio , unas 32 temporadas . En todas estas temporadas tan solo he visto la cartulina roja una vez y fué en mi 1ª temporada de veterano cuando confundí la competitividad de la regional con el pasatiempo de los veteranos , no me ha vuelto a pasar mas . Nunca he recibido una sanción ,ni por acumulación de tarjetas , ni por nada y sobre todo he sido en el campo el principal aliado de los árbitros . Siempre he visto al árbitro como un elemento mas del juego , como la pelota ( a veces se juega con globos y otras con piedras ) , el terreno de juego ( ejemplos como el de la Damm y el del Hospi por comprobar diferencias ) , el equipo contrario ( no es lo mismo jugar ante el lider que ante un descendido ) , el público ( en muchos campos es básico ), las condiciones metereólogicas , etc . ¿ A que intentamos adptarnos a todas estas cosas ? , pues entonces ¿ por qué no enseñamos a los jugadores a adaptarse al colegiado que nos ha tocado ? . Como entrenador he trabajado este aspecto y los resultados por positivos , son sorprendentes . 1º conseguimos bajar el nivel de tarjetas , 2º el jugador y el equipo asume errores y aprende de ellos con mayor facilidad , 3º los árbitros , si les ayudas , acaban ayudándote ; 4º dominas uno de los elementos de forma natural , 5º tu equipo se centra en los aspectos deportivos exclusivamente .Si logramos entre todos reconducir las decisiones del árbitro como algo natural , humano y se respeta ( aunque es lícito no estar de acuerdo ) su figura como la máxima autoridad en el terreno de juego , tendremos un camino mas llano hacia la formación de ese niño en el aspecto humano y deportivo . Ese niño podrá ser futbolista con mas argumentos que si tan solo dirije su frustración ante una decisión del juez culpándole de todos sus males . Para esto es primordial la función del entrenador , como figura docente , y de los padres .
Una vez que entendamos esto , podremos dirigirnos al comité de árbitros con la fuerza moral y con el sentido de la justicia que requiere cada caso cuando un árbitro es sospechoso de tomar decisiones injustas ( caso de expulsiones sobre todo ) o cuando se viven situaciones en las que el árbitro actúa de mala fé .Los árbitros si arbitran con tranquilidad y colaboración mejoran normalmente y lo que todos queremos son árbitros que impartan justicia o que piten lo que realmente ven , ya que una misma jugada toma caminos diferentes según el ojo que lo ve .